SEMANA SANTA EN FAMILIA TODO EL AÑO

            José Maria Ponce cuadrado

En estos tiempos que corren, donde lo mas comentado son los programas de televisión o los juegos de videoconsola que tenemos, se abre una polémica suscitada por los medios de comunicación y todo tipo de clases sociales, políticas, religiosas etc. “LA FAMILIA”. Sin duda para mí la familia es un vinculo de primera necesidad, quizás por la forma de haber crecido en ella, primero mi abuela y después mi madre han sido todo un empeño en que la familia este lo más unida posible, solo puedo decir que me siento muy orgulloso de tener ese mismo sentimiento, el cual intento transmitir a mis hijas, por lo que me veo en la grata situación de  poder decir “ GRACIAS MAMA”.  Una forma más de vivir la familia es la semana santa, pero no solo los días de semana santa, si no todo el año. Para empezar debemos de sentir la hermandad desde dentro de ella y de la familia, hacer participe a todos los miembros de la familia del sentimiento de ser Nazareno. Para ello hay que hacer participe a todos los nazarenos de los preparativos de cada semana santa, dejar que la juventud entre en la hermandad a lo grande, escuchando sus propuestas y dando formas a ellas. Creo que debemos hacer más actividades lúdicas en familia, viajes, comidas de hermandad, actos de convivencia con otras hermandades etc. Con ellos estaremos haciendo dos cosas a la vez,  contagiar al resto de nuestra familia del sentimiento de la semana santa y  preparar a los futuros dirigentes de la hermandad, hay que tener muy claro que sin juventud no hay futuro. Por tanto empecemos por nuestra propia familia, que todos sean  nazarenos y salgan en todas las procesiones de la hermandad, que vengan a algunas reuniones y aporten ideas para las próximas procesiones, que comenten lo que sienten a sus amistades y los contagien de esa maravillosa  ilusión.

     Espero que esta semana santa del 2008 sea la semana santa de la familia, donde pensemos que hay algo que todos tenemos al nacer, seamos de la condición que seamos y la formen los miembros que la formen, es el primer regalo de dios, tu familia, y  en cada uno esta él saberla apreciar, transfórmala o aumentarla. Pero sobre todo cuidarla.